Tesoros

La pregunta del dia fuè a temprana hora, en mi intento diario de buscar a Dios; y fuè si estarè aprovechando todo lo que me viene a la mano para vivir, para disfrutar , para dar, para servir. Las bendiciones diarias que me da el Señor directo a mi mano , las que me da en el desierto de las mùltiples pruebas, todo aquello de que disfruto, aun el aire que respiro y me permite vivir; cada mañana que abro mis ojos , que veo lo que me ha prestado para mi gozo. Es el momento cuando agradesco los años vividos y el vislumbre de los primeros rayitos de sabiduria, adquirida no por mèrito propio, sino por haber derribado o cruzado las montañas de la mano de mi creador.Quiero creer que puedo acumular preseas para el futuro eterno en el cual creo, y cambiarlas por un trofeo mas grande al llegar a la meta.Algo asi como buscar el tesoro al final del arcoiris como solia pensar cuando era niña.Es mas fàcil ilustrar esta inquietud con la leyenda que me hizo pensar y que quiero compartir: "Tres hombres cruzaban a caballo un desierto durante la noche, cuando se acercaban a un riachuelo seco, escucharon una voz que les decia que desmontaran y recogieran unas piedras, ponerlas en sus bolsillos y no mirarlas hasta el dia siguiente. Se les prometiò que si obedecìan las instrucciones iban a estar tristes y alegres a la vez. Hicieron lo indicado y siguieron su camino. Cuando asomaron los primeros rayos de sol metieron ansiosos la mano en sus bolsillos para sacar las piedras, que para su sorpresa se habian transformado en diamantes , rubies y otras gemas valiosas. Y entonces se dieron cuenta de que estaban alegres , pero tristes como la promesa que se les hizo; alegres por haber recogido las piedras pero muy tristes por no haber recogido mas." ¿ No es cierto que vale la pena preguntarse que recompensa merezco por lo que he hecho con lo que se ha puesto en mis manos? y que , si me fueran a dar premio conforme a mi servicio a los demàs. Creo que comenzare a atesorar en el banco celestial.